Comida para niños
Los niños, nuestros queridos niños, nos producen un cierto dolor de cabeza especialmente en ciertas edades, cuando a ellos no se les da la ganita de comer ciertos alimentos. La eterna pelea de la mamá, el niño, el plato y la cuchara. Desde que son unos bebesitos empiezan a hacer rechazo de ciertos alimentos que la mamá muy preocupada, ofuscada y sin saber que hacer, trata de darselo con canciones, besitos, caricias y arruyos. Y si ya cumplió los tres, los cinco o los siete...la tragedia griega es digna de una ópera inconclusa porque no termina. ¡No se preocupe!
Hoy en día el mundo de los niños es maravilloso, infinito, lleno de música, colores, sonidos y lleno de todas las cartillas y libros que usted se imagine para que su niño se alimente bien, coma tranquilo y no sufra por las benditas horas de sentarlo a la mesa. Su creatividad de madre debe ir combinada con todas las variedades de alimentos que se ofrecen. Las gelatinas son animalitos que saltan, las compotas son suaves como cada fruta que representan, la leche trae cascabeles. Pero eso sí, como madres tenemos que estar alerta cuando ese berrinche de algo que el rechaza o de varios días que pasan y él no quiere comer...hay que averiguar si está enfermo, hay que ver si no le sienta bien, será que ha comido algo entre horas, será que no lo atendemos lo suficiente cuando les damos de comer, existe algún conflicto de convivencia, será que no tenemos en cuanta sus gustos, será que no tiene buen animo...Todas estas preguntas tenemos que hacerlas como madre. Ningún niño sano se deja morir de hambre. Debemos ofrecerle una alimentación variada, sabrosa, suave y debemos hacer todo lo posible por acompañarlos. Los sicologos infantiles han estudiado que los niños comen mejor cuando están con el resto de la familia, cuando su madre les pone la mayor atención. Importantisimo...tenga una disciplina de darle o servirles la alimentación a la hora exacta todos los días.
Comentarios
Publicar un comentario